24 preguntas que debes hacer antes de alquilar un piso.
Es mejor tener todo claro antes de firmar el contrato de alquiler, así evitarás sorpresas y conflictos.
Alquilar una vivienda puede ser un momento precioso. Un nuevo barrio, una nueva casa, proyectos a estrenar… Sin embargo, puede volverse un auténtico dolor de cabeza si resulta que no es lo que habías previsto. Para evitar riesgos innecesarios, conviene hacer una serie de preguntas e investigar varias cuestiones antes de firmar el contrato de arrendamiento. Aquí te dejamos algunas ideas sobre las preguntas que debes hacer, tanto a ti como al propietario del inmueble, antes de alquilar una casa.
1. ¿Cuál es el precio del alquiler mensual?
Esta es, a priori, la pregunta más relevante, ya que determina el coste de la que será tu vivienda. ¿Cuánto cuesta la renta? Además, es importante que tengas en cuenta los gastos adicionales al alquiler, como la comunidad, la luz, el gas, el agua, etc.
2. ¿Qué incluye el precio del alquiler?
Además del alquiler mensual, debes conocer qué otros gastos están incluidos en el precio y cuáles no. Por ejemplo, ¿quién paga la cuota de la comunidad de propietarios? ¿Y la calefacción central o el agua caliente? ¿La luz? ¿El wifi? ¿A quién le corresponde pagar el IBI? Debes despejar todas estas dudas para evitar llevarte una mala sorpresa.
3. ¿Están dados de alta los suministros?
Es necesario que los suministros (agua, luz, gas) estén dados de alta antes de mudarte. De lo contrario, la vivienda sería inhabitable y no se podría alquilar. Una vez hayas firmado el contrato, has de cambiar la titularidad de los mismos, según hayas pactado con el propietario.
4. ¿Qué tipo de contrato de alquiler se va a firmar?
Existen varios tipos de contratos de alquiler, cada uno con sus propias características. Es importante que conozcas los diferentes tipos de contratos antes de firmar uno.
5. ¿Cuál es la duración del contrato de alquiler?
La duración del contrato de alquiler puede variar. Los contratos más comunes son de un año, dos años o tres años, ampliables. Según la ley, para el alquiler de vivienda habitual, el tiempo que puedes alquilar se pactará entre tú y el propietario. Si decides alquilar por menos de cinco años (o menos de siete años si el propietario es una empresa), el contrato se renovará automáticamente cada año hasta que alcance al menos cinco años (o siete años si el propietario es una empresa), a menos que tú avises al propietario con al menos treinta días de anticipación que no deseas renovar.
6. ¿Se admiten mascotas?
Si quieres entrar a vivir en un piso en alquiler y tienes un animal de compañía, deberás preguntar al casero si acepta. De lo contrario, podrá rescindir el contrato. Si ya has firmado el contrato, verifica si existe una cláusula que lo prohíba. Si no la hay, no te podrá echar por ese motivo.
7. ¿Se puede fumar en el piso?
Otra cláusula común es la que posibilita o prohíbe fumar en el piso. Asegúrate de que esto aparezca reflejado en el contrato de alquiler.
8. ¿Hay otros gastos adicionales a la fianza?
Además de la fianza, que es de un mes para el arrendamiento de vivienda habitual, puede haber otros gastos adicionales, como una garantía adicional.
9. ¿Quién debe hacerse cargo de las reparaciones?
En general, según la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), el arrendador es responsable de realizar las reparaciones necesarias para mantener la vivienda en condiciones de habitabilidad, a menos que el deterioro sea causado por el arrendatario. El arrendatario debe notificar al arrendador sobre la necesidad de reparaciones y permitir que el arrendador verifique el estado de la vivienda.
En casos de reparaciones urgentes para evitar daños graves, el arrendatario puede realizarlas previa notificación al arrendador y luego solicitar el reembolso de los gastos. Sin embargo, es conveniente reflejar todos los detalles posibles en el contrato y preguntar antes de entrar a vivir en el piso.
10. ¿Está amueblada la vivienda o está sin amueblar?
Esto es algo especialmente pensado para aquellas personas que alquilan sin posibilidad de visitar la vivienda antes, por ejemplo, estudiantes. Aunque el anuncio del piso contenga fotos con muebles, es mejor preguntar por si acaso. Quizá las fotos sean antiguas.
11. ¿Está la vivienda en buen estado?
Siempre se tiene que hacer todo por inspeccionar la vivienda ‘in situ’ antes de firmar el contrato de alquiler. Debes comprobar que la casa está en buen estado y que no hay daños graves.
12. ¿Hay ruido?
Si la vivienda está situada en una zona urbana, es crucial comprobar si existen ruidos molestos. Lo ideal es que te acerques a la vivienda en alguna hora que creas que puede haber bullicio.
13. ¿Incluye aparcamiento?
Si tienes coche, es importante preguntar si la vivienda incluye aparcamiento. Normalmente, esto lo suelen cobrar aparte, aunque depende de cada caso. En caso de que no haya, lo ideal es que vayas a la zona en la que se ubica el piso varios días y veas la dificultad para aparcar.
14. ¿Hay zonas verdes o parques cerca?
Si tienes niños, sobre todo, es interesante preguntar e investigar si hay zonas verdes o parques cerca.
15. ¿Hay colegios o institutos cerca?
Si tienes hijos en edad escolar, debes comprobar si hay colegios o institutos en el barrio, o si estos tienen su propio servicio de transporte, en caso de que estén lejos.
16. ¿Qué supermercados o tiendas están cerca?
Para que tu nueva vida te resulte lo más cómoda posible, es conveniente preguntar qué tiendas y supermercados están cerca al piso.
17. ¿Qué transporte público hay?
Es relevante preguntar si el sistema de transporte público funciona bien en la zona o podrás perder mucho tiempo en tu vida diaria. ¿Hay autobuses? ¿Metro? ¿Tren? Pregunta todo y acércate a averiguarlo.
18. ¿Hay zonas de ocio cerca?
Si te gusta salir de noche, ir al cine, a museos u otras actividades de ocio, debes comprobar y preguntar si existen, o a cuánta distancia están del piso que te gusta.
19. ¿Existen otros inquilinos?
Esta pregunta es relevante si se va a alquilar una habitación o se va a entrar en un piso compartido. Si hay otros inquilinos, es conveniente hablar con ellos para conocer sus opiniones sobre la vivienda, sobre el propietario, el barrio y todo lo demás que creas conveniente.
20. ¿Estás seguro de que quieres vivir en esa zona?
Es importante visitar la zona antes de firmar el contrato de alquiler. Vas a vivir en esa casa durante un periodo de tiempo prolongado y debes conocer todos los detalles posibles para evitar frustraciones y problemas. Pasea por sus calles, pregunta a los residentes sobre el barrio. ¿Está cerca de tu trabajo o lugar de estudios? ¿Hay delincuencia? Todo esto puede parecer algo excesivo, pero puede suponer la diferencia entre unos años agradables o unos de pesadilla.
21. ¿Puedes permitirte el alquiler?
Es una pregunta para uno mismo. Debes calcular tus gastos mensuales para asegurarte de que puedes permitirte el alquiler y contar con unos fondos extra para cualquier imprevisto que pueda surgir.
22. ¿Hay cláusula de penalización por desistimiento?
La LAU permite al inquilino abandonar la vivienda alquilada una vez transcurridos seis meses si avisa al propietario con 30 días de antelación. Sin embargo, puede existir una cláusula que establezca que el inquilino deba indemnizar al arrendador con una cantidad equivalente a una mensualidad de la renta en vigor por cada año del contrato que reste por cumplir. Los períodos de tiempo inferiores al año darán lugar a la parte proporcional de la indemnización. Asegúrate de preguntarlo.
23. ¿Cuáles son las normas y reglas de la comunidad?
Estas reglas suelen estar establecidas por la junta de propietarios o el administrador del edificio y pueden abordar temas como el ruido, el estacionamiento, el uso de áreas comunes, la basura y otras cuestiones relacionadas con la convivencia. Es esencial conocer estas normas para asegurarse de cumplirlas durante la estancia en el piso.
24. ¿Se permiten modificaciones en la propiedad, como pintar las paredes o colgar cuadros?
En muchos contratos de alquiler, se permite al inquilino realizar modificaciones ‘cosméticas’ en la propiedad, como pintar las paredes o colgar cuadros, siempre y cuando se restaure la propiedad a su estado original antes de la mudanza. Sin embargo, es importante aclarar estas condiciones con el arrendador antes de realizar cualquier modificación para evitar conflictos.
Con estas preguntas y todas las que se te ocurran estarás más protegido de posibles disputas en el futuro. No debes desechar cualquier medida cautelar cuando se trata de alquilar una vivienda.
Fuente: Idealista