¿Cuál es la duración mínima de un contrato de alquiler en 2023?
La duración de los contratos de arrendamiento dependen del tipo inmueble y la finalidad que se destine al mismo.
La duración de los contratos de alquiler depende del tipo de inmueble y la finalidad que se destine al mismo. No es lo mismo un arrendamiento de temporada, que uno de vivienda habitual o destinado a locales comerciales. En este artículo te explicamos la duración máxima y mínima de los contratos de alquiler.
¿Cuánto dura un contrato de alquiler en 2023?
Antes de redactar un contrato de alquiler deberá fijarse la duración del mismo. Para un contrato de alquiler de vivienda habitual el plazo inicial que se suele establecer es de un año, ampliable a cinco.
Para los contratos con una duración inferior a cinco años, o siete si el arrendador es una persona jurídica, llegado el día del vencimiento del contrato, este se prorrogará obligatoriamente por plazos anuales hasta que el alquiler alcance una duración mínima de cinco años, o de siete años si el arrendador fuese persona jurídica.
Después de este periodo, en todos los contratos de alquiler firmados desde marzo de 2019 la última reforma de la LAU establece una prórroga táctica de tres años para personas físicas, salvo que una de las partes manifieste la voluntad de no renovar el mismo.
Duración mínima del contrato de alquiler
La duración mínimo del contrato de alquiler es de 5 años para una persona física, aunque lo habitual es firmar un contrato de un año e ir ampliando hasta alcanzar ese plazo. En cambio, si el arrendador es una persona jurídica, la duración mínima será de siete años y una prórroga mínima de tres años.
Una vez transcurridos al menos seis meses desde la firma del contrato de alquiler, el inquilino tiene la opción de finalizarlo. Para ello, debe avisar al arrendador con al menos un mes de antelación y, dependiendo de lo que se haya pactado, habría que pagar algún tipo de indemnización al propietario. En cambio, si se espera un año y se cumple el plazo de preaviso, no existiría ninguna sanción.
Duración mínima del contrato de alquiler comercial
En el caso de los locales comerciales, la duración también es libremente pactada entre inquilino y propietario. En el supuesto que no se determine, esta será de un año sin derecho a la prórroga que sí se da en el alquiler de vivienda, aunque lo habitual es que se fije un plazo de cinco años.
Contrato de alquiler de duración indefinida
Si el contrato de alquiler de vivienda habitual se pacta por tiempo indefinido, la duración será de un año, pudiendo el inquilino habitar la casa hasta llegar a los cinco que marca la ley.
El contrato de alquiler y sus prórrogas
Una vez que se ha cumplido la duración del contrato de alquiler, este se puede prorrogar anualmente hasta un máximo de tres años, salvo que el propietario comunique con cuatro meses de antelación su voluntad de no renovar o que el inquilino avise con dos meses de antelación.
Es decir, si ni el propietario ni el inquilino comunican su voluntad de no extender el arrendamiento, este, por ley se prorrogará automáticamente por plazos anuales. Además, la extensión de un contrato de alquiler bajo tácita de reconducción puede ser de un mes, pero debe existir registro escrito de esta condición.
El propietario necesita recuperar la vivienda en alquiler
Una vez finalizado el primer año del contrato y siempre que el arrendador sea una persona física, no se aplicará la prórroga obligatoria del contrato si, al momento de su firma, se ha dejado constancia explícita de que el propietario necesita ocupar la vivienda antes de los cinco años.
Esto puede darse por necesidad de residencia permanente para él mismo, para sus parientes en primer grado de consanguinidad o adopción, así como para su cónyuge en casos de sentencia firme de separación, divorcio o anulación matrimonial
Duración del contrato de alquiler de temporada
Un alquiler de temporada es el arrendamiento de una casa que no busca ser la vivienda permanente del inquilino, sino que se utiliza para cubrir una necesidad determinada, como puede ser un proyecto de trabajo, un curso de estudios, etc.
Los contratos de alquiler de temporada se rigen, en primera instancia, por lo que pacten el propietario y el inquilino. La LAU únicamente mantiene la obligación de proporcionar una fianza, pero las partes son libres de acordar la renta, duración, la posibilidad de prórroga, etc. A diferencia de los contratos de arrendamiento ‘al uso’, no cuentan con una duración mínima y máxima del alquiler.
¿Qué pasa después de los 5 años de alquiler?
Pasados los 5 años del inicio del contrato de alquiler, este se renovará automáticamente si ninguna de las partes ha expresado su voluntad de no hacerlo. En caso de que así sea, el arrendamiento se renovará por un plazo de tres años. Si se cumplen los plazos de preaviso (cuatro meses para el propietario y dos para el inquilino), se finalizará.
Fuente: Idealista