Analizamos cuáles son los aspectos clave para saber si una propiedad tiene un precio acorde al mercado y sus necesidades.
Para muchos es un tema subjetivo pero desde Sunset Home queremos explicar varios factores y aspectos que hacen definir el precio de una vivienda. Nada es al azar.
- La ubicación:
Sí, este aspecto quizás sea el más importante. Hay que comprar siempre precios respecto a otras viviendas que se ofertan por al zona, siempre que sean de similares características (estancias, dimensiones, año de construcción…). Esto nos ayudará a valorar cómo está el mercado y cómo se está comportando.
- Las características y la altura:
Siempre habrá grandes diferencias entre viviendas muy similares, por lo que habrá que afinar bien nuestro ojo para valorarlas. Tras la pandemia y el confinamiento de 2020, el mercado ha cambiado en gran parte, por lo que encontramos con clientes que demandan viviendas con espacios abiertos, terrazas o patios, por lo que estos pisos habrán subido sus precios.
También influye, aunque en menor medida, la orientación y por supuesto, si es exterior (teniendo mayor precio) o interior además de si es una planta alta o baja.
- La eficiencia energética:
El parque inmobiliario canario tiene mucho que decir en esto. Ahora mismo gran parte de las viviendas en Canarias tienen una pésima certificación energética y esto, tiene mucho que ver a la hora de establecer un precio a la vivienda. ¿Qué se tiene en cuenta con esto? Pues si dispone de materiales aislantes que mantengan el calor o electrodomésticos de bajo consumo. Si esto no existiera, el gasto energético siempre puede ser más alto, por lo que sería una buena oportunidad para bajar el precio de la vivienda y luego el cliente asuma el coste de arreglar estas posibles necesidades.
- Equipamiento comunitario:
Por último, los servicios que ofrece el inmueble también son importantes a la hora de estimar un precio. Si la vivienda dispone de zonas comunes como piscina, jardín, área infantil, pistas deportivas o gimnasio; estos equipamientos deben reflejarse en el precio como un valor añadido.