Combina lo mejor del diseño y estilo escandinavo con el minimalismo japonés. Quieres darle otro aire a tu casa porque ya va tocando. No quieres nada rococó, recargado ni estridencias en colores y estampados porque simplemente, no van contigo. ¿Qué estilo de decoración te convendría más? No lo dudes, una combinación del estilo nórdico (también conocido como escandinavo) y del estilo zen. ¿Cómo se llama esto? Pues nordic zen, una nueva tendencia en decoración del hogar que combina el minimalismo escandinavo y el tradicional estilo sobrio japonés.
Tanto el uno como el otro (nórdico y zen) comparten la simplicidad y la elegancia. El nórdico por ejemplo, utiliza materiales naturales como la madera y el cuero, con tonos suaves y neutros, lo que genera espacios amplios, acogedores y relajantes. También, uno y otro son extremadamente funcionales: no hay accesorios ni adornos innecesarios y todo esto favorece la claridad mental (amén de generar espacios más amplios visualmente).
Muebles de líneas sencillas
Otro elemento que comparten estos estilos de decoración es que sus muebles suelen ser de líneas limpias y sencillas. Con tanto en común no es de extrañar que surja una tendencia que reúna lo mejor de uno y otro, el denominado Nordic Zen, que sin duda dará un toque de modernidad a tu hogar, sin lugar a estridencias ni a ruido visual.
En este sentido, la marca de mobiliario Banak ha lanzado una nueva colección, Haiku (el nombre tiene que ver con un tipo de poesía japonesa), que destaca por la sencillez de los diseños, los tonos neutros y las líneas limpias que ayudarán a que tu casa parezca acogedora a pesar de disponer de pocos elementos, como quiere el minimalismo nipón. Este estilo de decoración se puede aplicar en toda la casa: dormitorios, salones, comedor… Se trata de que combines, como hemos comentado, muebles de líneas sencillas, con textiles neutros (tonos grises y beige que complementan la madera del mobiliario). En paredes y techos, el color blanco es el idóneo puesto que reflejará la luz natural y aumentará la sensación de amplitud. Y entonces, ¿nada de color? Pues muy escogido y en tonos suaves y pastel, pero siempre empleado en pequeñas dosis, en cojines, mantas, jarrones, algún cuadro… porque de abusar ya no será un estilo Nordic Zen.
En Banak, aconsejan, para crear esa armonía natural combinar “Fibras orgánicas, maderas con barnizados naturales y tejidos como el bouclé o el terciopelo en tonalidades otoñales. Maceteros, jarrones de terracota, cojines en ratán y alfombras de algodón o lana contribuyen a evocar esa atmósfera silenciosa y natural que vamos buscando a través del estilo Nordic Zen”, explican desde la firma.
Sin duda, un estilo de decoración que viene a aportar elegancia pero también, calma y serenidad a nuestros ritmos de vida vertiginosos.
Fuente: Idealista
