Tip 1. Depurar y ordenar

El primer paso y fundamental antes de empezar cualquier transformación: depurar. Sólo con eso ya tu casa puede verse muy diferente. Ordenar, guardar todo lo que no tiene que estar a la vista. Este paso es ideal para buscarle lugar a aquellas cosas que no lo tengan. Ordenar te da limpieza visual. Mirar con atención y eliminar todo lo que no te guste, esté en mal estado, o estorbe (física y/o visualmente). Depurar y ordenar es una manera de hacer espacio para poder ver con más claridad y darle la bienvenida a lo nuevo.

Tip 2. Utilizar plantas, flores y frutas

Son 3 elementos decorativos que pueden darle a tu casa mucha vida y calidez con muy poco. Plantas de interior, ramas secas, ramas con hojas puestas en un florero, flores frescas (compradas o cortadas del jardín)… Lo que tengas a mano y te guste más.

¿Dónde ubicarlos? En todos lados: centros de mesa, mesas auxiliares, mesa ratona, consolas, mesas de luz, escritorios, cocina o el baño. En vez de tenerlas escondidas, las mismas frutas que consumís las puedes colocar en un bowl precioso y usarlas como elemento decorativo. Tal vez no son para todos los ambientes, pero no sólo en la cocina pueden funcionar. También en comedores e incluso en el living y en algunos exteriores.

Tip 3. Reciclar muebles y objetos

Esas piezas decorativas y de uso que están medio deslucidas pueden cobrar nueva vida con 2 simples elementos: pintura y telas. Incluso esos muebles u objetos que pienses que ya no sirven para nada pueden revivir. Acá es clave dejar volar la imaginación.

Objetos de uso que ya no sirven pueden reconvertirse en otra cosa o pasar a ser piezas decorativas con mucha onda. Por ejemplo: instrumentos musicales rotos, elementos deportivos viejos, bicicletas que ya no andan o no usan, máquinas de coser, de escribir, de fotos. Otra opción es conservar el uso original pero recuperar su expresión estética: pintar, retapizar, cambiar tiradores y empapelar.

Tip 4. Pintar o empapelar

Puedes darle nueva vida a un ambiente entero pintando o empapelando. Puede ser una pared sola para que funcione como pared de acento, o un ambiente entero o incluso el cielorraso. También puede ser una franja o un sector dentro de una pared. Podría jugar con formas. Si te animas, hasta un mural. Y una idea original y que puede quedar muy bien: pintar las puertas.

No hay excusa, las ideas son infinitas. En 10 o 15 días puedes lograr cambios sorprendentes que te acerquen a esa casa ¡Wow! que sueñas. Es solo cuestión de dejar volar la imaginación y de hacerlo. Porque las ideas se las lleva el viento. Tu casa necesita acciones.

Fuente: elle.clarin